Rizoma (o mejor micelio)



No es difícil pensar las redes digitales como una extensa red de raíces que interconectan la información que aparece en la superficie de nuestra pantalla. De alguna forma, lo que vemos en la pantalla es igual a una flor, un árbol un helecho, y lo que está detrás de ella, los metadatos, la informática, los algoritmos, y las interconexiones, son las raíces, el mundo subterráneo que no alcanzamos a ver. El internet en si mismo es una deep weeb: funciona en lo más profundo de lo que realmente alcanzamos a ver en su superficie. 

Pero no creo que el problema sea algo tan sencillo como decir que uno puede encontrar cualquier página de wikipedia a partir de otra con tan solo pasar por siete hipervínculos, y que solo se debe encontrar el camino de raíces correcto. Más bien, el sistema que nos hace pensar a nosotros a partir de la aparición del internet y las redes digitales funciona como un rizoma. El sistema de pensamiento, el nuestro, se ve afectado por cómo buscamos información en las redes. No estoy diciendo que haya libertad de ir a todos lados en lo profundo del sistema, eso sería decir que no hay control político o económico en las cosas que vemos en nuestra pantalla, pero pienso que la multiplicidad de pensamientos y el "dejarse llevar" por un flujo de pensamientos aparentemente no conectados, es más sencillo ahora que hay una red invisible que lo permite. 

Si las redes y el internet modifican las forma en que entendemos nuestro pensamiento, nuestro pensamiento se vuelve rizomático cuando dejamos que fluya y que nos lleve a donde sea que nos llevó el flujo. Puede que sea un flujo controlado, no lo niego, pero es más sencillo perderse en el pensamiento de uno mismo cuando uno ve su proceso desarrollarse en la pantalla que está al frente de uno. No niego que en mi tiempo libre, buscar mapas de haciendas y villas coloniales puede llevarme a un flujo que termine con "hunk daddy breeding twink", pero creo que eso es lo importante: en mi flujo de pensamiento que me llevó de una cosa a la otra, la colonia cobra la misma importancia que la pornografía en mi proceso de pensamiento. 

A diferencia de Delueze y Guattari, siempre he preferido la idea de micelio a la idea de rizoma. No solo por mis preferencias ambientalistas, sino porque creo que el micelio, los pequeños hilos de hongos que conectan toda la vegetación del mundo, crean una red más comprensiva de lo que es le pensamiento nómada que un rizoma. El micelio hace que un árbol en noruega pueda hablar instantáneamente con un frailejón en el paramo del Cocuy. Al menos esa es mi fantasía. Presiento que la forma en que entendemos las redes y el proceso que nos atraviesa cuando pensamos en ellas se asemeja más al micelio que al rizoma.  

Aun así, lo importante es el desarrollo del pensamiento. Delueze y Guattari, estoy casi seguro, no buscan generar conclusiones, dejar que el pensamiento se aplane en un estado constante de actividad. No llegar al climax de la conclusión, da la posibilidad de viajar en ese micelio o en esa raíz, en ese flujo, eternamente. El pensamiento sin jerarquías se opone a todo tipo de conocimiento académico, formal, universitario, investigativo, que se ha desarrollado hasta ahora. Pero las conclusiones aun creo que son importantes. No para vivir en la cima de la montaña, sino para saltar de cimas en cimas en otro sistema de pensamiento, uno que exista en el cielo, en las nubes. Las conclusiones en el proceso científico siempre tienen una intención política, y si mi intención al concluir algo es hacerle frente a un sistema que me dice que de otra forma no podría haber hecho la conclusión, creo que es correcto hacerla. 

Entonces, si concluyo que la colonia es igual al porno, y la argumento, por qué no podría ser este un proceso de pensamiento que permita ver la historia de otra manera, de una forma múltiple, incluso divertida, que abra otras posibilidades de relaciones de pensamiento, y que no haga de la colonia un ladrillo histórico. La conclusión de que la colonia es igual al porno, que vino de un flujo de pensamiento desorganizado, da lugar a una nueva forma de ver las cosas. Se vuelve meseta cuando de ahí parto hacia otros flujos. O se vuelve micelio cuando de ese climax salto a otros, y a otros mas, en una red invisibles de puntas de nevados que se conectan en el cielo, sin algo físico, solo con la idea de que puedo saltar de un nevado a otro. 

Tocaría aprender a aprovechar ese "dejarse llevar" en la red con la conciencia de las políticas y poderes que lo controlan. Y ese dejarse llevar en el flujo de las redes y del sistema de conexiones invisibles permitirá resignificar como pensamos, como vemos y como entendemos el mundo. Sería un sistema sin jerarquías ni elites del pensamiento, ni en la academia, ni en nuestro propio proceso mental. Solo faltaría ver cómo podemos arrebatarle esa jerarquía a los que controlan la información en la pantalla. Por ahora, en las redes, ellos son el padre, y freud diría que tenemos que matarlo. Pero Guattari de pronto diría otra cosa. Por ahora no matemos al padre, sino que con la conciencia de saber quién lo es, veamos hacía donde nos lleva. 

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